martes, diciembre 26, 2006

Feliz Navidad!!!!!!

"NICHOLAS ERA…
Más Viejo que el pecado, su barba no podía
tornarse más blanca. Deseaba morir
Los enanos nativos de las cavernas Árticas no
hablaban su idioma, pero conversaban en su propia
lengua gorjeante, conducían incomprensibles
rituales, cuando no estaban verdaderamente
trabajando en las fábricas.
Una vez al año lo forzaban, sollozando
y protestando, hacia la Noche Infinita. Durante
el viaje se posaría al lado de cada niño
del mundo, dejando uno de los regalos
invisibles de los enanos junto a sus camas. Los
niños dormían, congelados en el tiempo.
Envidiaba a Prometeo y a Loki, Sísifo yJudas.
Su castigo era mas duro.
Jo
Jo
Jo."

Gracias amigo...

sábado, diciembre 09, 2006

Hubo Una Vez...

Hubo una vez un emperador que convocó a todos los solteros del reino, pues era tiempo de buscar pareja a una de sus hijas.
Todos los jóvenes del reino asistieron y el rey les dijo: “Os voy a dar una semilla diferente a cada uno de vosotros; al cabo de seis meses deberán traerme en una maceta la planta que haya crecido, y la planta más bella ganará la mano de mi hija”.
Así se hizo. Pero hubo un joven que plantó su semilla y no logró germinarla; mientras tanto, todos los demás jóvenes del reino no paraban de hablar y mostrar las hermosas plantas y flores que habían crecido en sus macetas.
Llegaron los seis meses y todos los jóvenes desfilaban hacia el castillo con hermosísimas y exóticas plantas. El joven estaba demasiado triste pues su semilla nunca geminó. Ni siquiera ir al palacio, pero su madre insistía en que debía ir pues era un participante y debía estar allí.
Con la cabeza baja y muy avergonzado, desfiló último hacia el palacio con su maceta vacía. Todos los jóvenes hablaban de sus plantas, y al ver a nuestro amigo se rieron y burlaron de él. En ese momento, el alboroto fue interrumpido por el ingreso del rey. Todos hicieron su respectiva reverencia, mientras el rey se paseaba entre todas las macetas admirando las plantas.
Finalizada la inspección hizo llamar a su hija, y llamó de entre todos al joven que llevó su maceta vacía. Atónitos, todos esperaban la explicación de aquella acción.
El rey entonces: “Este es el nuevo heredero del trono y se casará con mi hija, pues a todos ustedes se les dio una semilla infértil, y todos trataron de engañarme plantando otras plantas, pero este joven tuvo el coraje de presentarse y mostrar su maceta vacía, siendo sincero, real y valiente, cualidades que un futuro rey debe tener y que mi hija merece”.

viernes, octubre 27, 2006

El Árbol De Los Problemas

El carpintero que había contratado para ayudarme a reparar una viejagranja, acababa de finalizar un duro primer día de trabajo. Su cortadora eléctrica se daño y lo hizo perder una hora de trabajo y ahora su antiguo camión se niega a arrancar. Mientras lo llevaba a casa, se sentó en silencio. Una vez que llegamos, me invito a conocer a su familia. Mientras nos dirigíamos a la puerta,se detuvo brevemente frente a un pequeño árbol, tocando las puntas de las ramas con ambas manos. Cuando se abrió la puerta, ocurrió una sorprendente transformación. Subronceada cara estaba plena de sonrisas. Abrazo a sus dos pequeños hijos y le dio un beso a su esposa. Posteriormente me acompañó hasta el carro. Cuando pasamos cerca delárbol, sentí curiosidad y le pregunte acerca de lo que lo había vistohacer un rato antes. "Oh, ese es mi árbol de problemas", contesto. "Se que yo no puedo evitar tener problemas en el trabajo, pero una cosaes segura: los problemas no pertenecen a la casa, ni a mi esposa, ni amis hijos. Así que simplemente los cuelgo en el árbol cada noche cuando llego acasa. Luego en la mañana los recojo otra vez". "Lo divertido es", dijo sonriendo, "que cuando salgo en la mañana arecogerlos, no hay tantos como los que recuerdo haber colgado la noche anterior".

miércoles, octubre 04, 2006

El Chacal, El Tigre Y El Hombre

Un tigre iba por un pastizal buscando alguna para llenar su gran estómago cuando, por no mirar dónde pisaba, cayó en las profundidades de un pozo.
- ¿Y ahora cómo salgo de aquí? – se preguntó aterrado.
Saltó, rugió y trató varias veces de trepar, pero lo único que consiguió fue llenarse de tierra y romperse un par de uñas. Quiso la buena fortuna que pasara por allí un anciano peregrino que oyó el desgarrado lamento del animal y, conmovido por su situación, lo ayudó a salir de aquella trampa arrojándose con su naturaleza y en cuanto estuvo en libertad, se abalanzó sobre el hombre para zampárselo de un bocado.
- Pero… ¿qué haces? – protestó el anciano -. Acabo de salvarte la vida y ¿así me agradeces?
- Una cosa no tiene que ver con la otra. Tú me salvaste la vida porque quisiste hacerlo así. Yo te voy a comer porque sencillamente tengo hambre – y se aprestó a dar la primera dentellada.
- ¡Espera! – lo detuvo el peregrino -. ¡Al menos merezco piedad! ¡Pregúntale a cualquiera si lo que pido es justo!
El tigre lo pensó unos instantes y luego accedió:
- Está bien. Si consigues tres opiniones que coincidan con la tuya, te dejaré partir. Pero si no lo logras, te devoraré antes de que puedas decir “adiós”.
Así lo acordaron y fueron juntos a interrogar a una acacia que se hallaba a unos metros.
En cuanto conoció la historia, el árbol respondió quejumbroso:
- Ah, no sé que decirte, anciano, pues mi suerte no es mejor que la tuya. Vivo dándole refugio y sombra a cuanta criatura pasador aquí, ¿y qué recibo a cambio? Las bestias me arañan y los hombres me arrancan las ramas por pura diversión. Esa es la forma como me agradecen los buenos servicios que doy.
Fueron entonces a preguntarle al camino que bordeaba aquellos campos.
- ¡Ah, no soy yo quien pueda opinar sobre semejante tema! – se quejó, luego de escuchar la historia -. Presto un gran servicio permitiendo que la gente y los animales puedan transitar de un pueblo a otro, y ellos me agradecen abriéndome dolorosos surcos en el cuerpo y tirándome encima sus desperdicios. De modo que no creo que exista en este mundo eso que llamas gratitud, anciano.
- ¿Lo ves? – preguntó el tigre con expresión triunfal -. No hay razón por la cual yo no pueda comerte.
- Espera – pidió el peregrino -. Aún falta una tercera opinión. Le preguntaremos a ese chacal que viene por aquí.
Así olieron y el chacal, luego d escuchar la historia muy atentamente, comentó un tanto confundido:
- Es una historia bastante enredada y no la entendí muy bien. Tú dices que estabas dentro de un pozo cuando pasó el tigre y …
- No – lo corrigió el tigre -. Fue exactamente al revés.
- Aaaah – dijo el chacal como si ahora tuviera el panorama mucho más claro, y siguió hablando como si las cosas le hubieran ocurrido a él -. Entonces, yo caí en el pozo y… Ay, no. No fui yo, ciertamente. Empecemos de nuevo. ¿Quién cayó en el pozo y quién lo ayudó?
- ¡Yo caí en el pozo! – bramó el tigre, exasperado por la lentitud del razonamiento del pequeño animal.
- Aaaaaaahhhh – asintió el chacal y pareció que por fin había entendido, pero preguntó, frunciendo el ceño:
- ¿Y por qué te caíste?
Harto ya de dar explicaciones, el tigre lo llevó hacia el pozo y le explicó con mucha claridad cómo le había sucedido semejante cosa.
- Mmmh – murmuró el chacal -, todavía no me queda muy claro. Venías caminando y …
- ¡Te lo demostraré! – rugió el tigre fuera de sí.
Y caminó directamente al pozo y se tiró en su interior.
- ¿Ahora has entendido por fin? – preguntó desde las profundidades.
- Sí, ahora entendí todo bien clarito – respondió el chacal mirándolo desde el borde.
- Bien, entonces ayúdame a salir de aquí, así terminamos con este asunto cuanto antes.
- Mmh… - dudó el otro -, no lo creo. Si he entendido bien – y creo que así es -, tú piensas que no debes corresponder a los buenos servicios que te prestan. De modo que, si tu único propósito al salir será devorarnos y no agradecer, no veo razón alguna por la que alguien deba ayudarte. Me pediste opinión y es esta. Ahora, creo que mejor te dejamos solo un rato, así podrás pensarlo tranquilo.
Y se sentó en un tronco a charlar animadamente con el hombre, mientras el tigre, en el pozo, ensayaba las mil y una formas de pedir perdón para que lo sacaran de allá.

Adaptación de una fábula India

miércoles, septiembre 06, 2006

No Fumadores Que Fuman

Por qué los no fumadores deben evitar la inhalación del humo exalado por los fumadores?

Las investigaciones llevadas a cabo en varias universidades de EE. UU. y Canadá y avaldas por la Agencia de protección Ambiental deEE.UU. han determinado que las personas no fumadoras pueden contraer diversas enfermedades,entre ellas cáncer de pulmón, por lo que la tolencia de concentración ambiental de dicho humo es cero.

¿Sabés la cantidad de cigarrillos que has fumado sin ser fumador?

Para tener en cuenta:

Si estás en un bar con fumadores durante 2 hs, has fumado 4 cigarrillos .
Si estás en la sección No fumadores de un restaurant durante 2 hs, has fumado 1.5 cigarrillos .
Si estás en una oficina donde se permite fumar durante 8 hs, has fumado 6 cigarrillos .
Si alguno de la familia fuma un paquete de cigarrillos en su casa, en 24 hs has fumado 3 cigarrillos .
Si estás sentado detrás de un fumador durante 3 hs, has fumado 1 cigarrillos .
Si estás en un automóvil, con ventanillas cerradas y una persona fumando, en 1 hs has fumado 3 cigarrillos.


No solamente Nicotina estás inhalando pues ésta es sólo uno entre 4000 compuestos químicos que contiene el cigarrillo. De esta canidad, al menos 43 son conocidos como causa de cáncer.

Referencia: E.P.A, Agencia de Control de Contaminación Ambiental de EE.UU.


VOS TAMBIÉN ESTÁS FUMANDO...

miércoles, agosto 23, 2006

Alta Suciedad, Nunca Es Igual

Parece que no hay mal que resista mucho sueño y ayuno
nos dicen que hagamos otras cosas
y especialmente
que nos miremos ciertos líquidos
periódicamente
asíduamente.
Pero yo no conozco mal que resista a veinte horas de sueño
y un prudente ayuno
ayuno quiere decir, por ejemplo
tomar gazpacho y ajo blanco
y en invierno guisos con abundante tocino y pan.
Y darse cuenta de que no siempre que
uno piensa que se va a morir
y que está hecho polvo se muere uno
y entonces si tenemos miedo
no evitamos el dolor
pero encima lo anticipamos
quiero decir...
Para seguir viviendo a veces con tal de estar sanos
vamos a hacernos chequeos
nos preocupamos
porque nos ha salido una mancha... un dolor
nuestra meta es vivir largo tiempo
y claro en el fondo no pretendemos vivir largo tiempo
pretendemos vivir a secas
pretendemos vivir
Si uno intenta vivir largo tiempo
el día a día se puede envenenar bastante
pero si uno no intenta cuidarse tampoco es buen plan
uno confunde la valentía con la temeridad
se granjea grandes cantidades de dolor
de modo que es muy delicado.
Cuentan de Alejandro que una vez se metió
en un río tumultuoso de la India,
todo con barro
persiguiendo al ejército que peleaba con él
y que cuando iban en mitad
los caballos perdieron pie
aquellas aguas estaban heladas
y se volvió a sus compañeros y les dijo:
"me cago en la leche os dais cuenta las cosas
que tengo que hacer para que me tengais respeto?"
eso pasa poco ahora
eso pasa poco ahora.
Respeto, respeto, respeto...

miércoles, agosto 16, 2006

La Yerba Mate


Cuentan que cuando el universo era todavía joven, hubo una noche que la fue la más negra de todas las noches. Ocurrió cuando la Luna se cansó de estar en el cielo y bajó a la Tierra para conocer, bien de cerca, las cosas que veía muy chiquititas desde ahí arriba.
Todos colaboraron en los preparativos del viaje. Las estrellas le regalaron una corona para que se adornara la cabeza. Las nubes se arrancaron algunos copos para hacerle un vestido. El cielo se recortó a si mismo un pedazo para abrigarla con una capa. Y el viento le dio un empujón para que bajara a la Tierra por el tobogán de colores del arco iris. La Luna estaba tan contenta que gritaba de alegría. Subió a las montañas y corrió por las praderas. Se bañó en el río y chapoteó a orillas del mar. Trepó hasta lo más alto de los árboles y olió los distintos aromas de las flores. Y se distrajo tanto que olvidó la recomendación de sus amigos: que se cuidara de los hombres y de las bestias – le habían dicho – pues tienen la costumbre de comerse los unos a los otros.
Demasiado tarde lo recordó, justo cuando un jaguar la miraba como si ella fuera la cosa más rica del mundo.
- No sé que eres – le dijo la bestia relamiéndose -, pero pareces bastante comestible.
Afortunadamente, cuando el animal se aprestaba a saltar sobre la pobre Luna, un hombre apareció y lo espantó con el fuego una antorcha.
La Luna casi volvió corriendo al cielo, del susto que tenía, pero el hombre la tranquilizó.
- No temas, criatura, que no te lastimaré.
Y la miró como si ella fuera la cosa más rara del mundo.
- No sé que eres, extraño ser de cara pálida y redonda, pero pareces muy indefensa para andar sola por la selva. ¿Tienes algún lugar donde pasar la noche? – preguntó, y la Luna no supo que responder porque tenía, ahí en el cielo, pero aún no quería regresar.
- Si no respondes es porque no debes de tenerlo. Ven conmigo, entonces – y la Luna, muy entusiasmada, lo siguió hasta su choza.
Allí esperaban la mujer y los hijos del hombre, quienes recibieron tan bien a la extraña que ella pronto se sintió como una integrante más de esa familia. Se sentó a la mesa y devoró con ganas todo lo que le sirvieron en la cena pues, como nunca había saboreado comida alguna, ahora quería probarlo todo. Más comía, más le servían, porque parecía que a aquellas gentes les contentaba verla contenta.
Cuando se sintió tan llena que apenas podía moverse, la mujer le preparó un lugar cercano al fuego, para que no pasara frío, y la arropó con una manta.
- Esta ha sido la mejor noche de todas mis noches – pensaba la Luna, muy contenta.
Esperó a que todos se quedaran dormidos para marcharse en silencio pero, en cuanto se levantó, vio una bolsa vacía tirada en el piso. Y más allá otra, y otra más. Y entonces cayó en la cuanta de que los alimentos que habían guardado esas bolsas ahora estaban en su estómago, y que probablemente ella había comido, en una sola noche, lo que la familia necesitaba para comer muchas otras noches.
Muy avergonzada se marchó y fue lamentándose durante todo el camino de regreso al cielo.
¡Aquellas gentes habían sido tan gentiles con ella, que le habían dado hasta lo que no podían darle! ¿Cómo podría compensarlos? Pensó mucho peo, como no se le ocurrió nada, se puso triste y por la mejilla comenzó a rodarle una enorme lágrima de plata que se vertió sobre la Tierra. De pronto la Luna vio que, en el mismo lugar donde la lágrima había caído, brotaba un arbusto muy grande, salpicado de florcitas blancas.
Entonces empezó a llorar con más ganas y más fuerza para que muchas más lágrimas de plata cayeran y muchos más arbustos crecieran.
Cuando el hombre se levantó por la mañana, descubrió asombrado que su casa estaba rodeada por un sinnúmero de arbustos. Como tenía tanta hambre, intentó masticar una hoja, pero era muy dura y para ablandarla la puso a hervir. De inmediato el agua empezó a despedir un aroma tan agradable que, antes que comerla, el hombre decidió beber el líquido. Y le gustó tanto que en seguida llamó al resto de su familia para convidarlos. Y ellos, apenas terminaron el brebaje, decidieron preparar una gran jarra para compartir con todos sus vecinos.
Desde entonces a la planta que nos regaló la Luna se la conoce como yerba mate, con la que se prepara una bebida que vuelve amables a los espíritus e invita a compartir.

Adaptación de una leyenda guaraní

lunes, julio 31, 2006

El Último Café

Llega tu recuerdo en torbellino,
vuelve en el otoño a atardecer
miro la garúa, y mientras miro,
gira la cuchara de café.

Del último café
que tus labios con frío,
pidieron esa vez
con la voz de un suspiro.

Recuerdo tu desdén,
te evoco sin razón,
te escucho sin que estés.
"Lo nuestro terminó",
dijiste en un adiós
de azúcar y de hiel...

¡Lo mismo que el café,
que el amor, que el olvido!
Que el vértigo final
de un rencor sin porqué...

Y allí, con tu impiedad,
me vi morir de pie,
medí tu vanidad y
entonces comprendí mi soledad
sin para qué...
Llovía y te ofrecí, ¡el último café!


Para descansar de los cuentos, quise compartir un tema que me encanta, es más, es mi tango favorito.
Y de paso les comento que pueden visitar a Fcen... un blog amigo...
Besos y gracias a todos los que pasan por aquí, mi público, mis fans... no, en serio muchas gracias! Para mi es muy importante.

domingo, julio 23, 2006

Los Duendes Y El Zapatero

Había una vez un zapatero al que le iba muy mal en su negocio de calzado hecho a mano. Tan mal le iba, que llegó el momento en que en su taller únicamente quedaba un trozo de cuero para hacer nada más que un par de zapatos. Esa noche lo cortó y lo dejó listo para coserlo a la mañana siguiente. Se acostó y se durmió.
Al levantarse al otro día, encontró en su mesa de trabajo que el par ya había sido cocido y el cuero lustrado. El zapatero tomó los zapatos, los miró por todas partes, revisó las costuras, la suela, los cordones: ¡una verdadera obra maestra!
Confundido, se fue a vender los zapatos. A un cliente le gustaron tanto que pagó el doble de su precio.
Aquella noche repitió lo mismo que la anterior: cortó el cuero y lo dejó preparado para coserlo al día siguiente, y al levantarse por la mañana los halló terminados a la perfección. Ni él ni su esposa pudieron explicarse qué clase de mano mágica y bondadosa trabajaba por las noches para ayudarlos…
Nuevamente el hombre marchó a vender los pares. De inmediato aparecieron clientes y con el dinero obtenido pudo comprar cuero para cuatro pares. A la mañana siguiente, otra vez, halló los cuatro pares terminados, y lo mismo le ocurrió muchas otras veces.
Pronto el zapatero se convirtió en un hombre de mucho dinero, casi rico.
Una tarde, cuando ya faltaba poco para la Navidad, la esposa del zapatero le propuso: “Quedémonos despiertos esta noche, y escondidos, para ver si podemos descubrir quiénes son los que nos ayudan de esta manera”. Así lo hicieron: dejaron la luz encendida, se escondieron en un armario, detrás de la ropa que había colgada en él y esperaron llenos de curiosidad.
A las doce de la noche, después de que las doce campanadas sonaron en el reloj, el matrimonio vio cómo, sigilosamente, entraban en la habitación tres lindos y pequeñísimos duendes que -¡Oh!- estaban desnudos a pesar del frío que hacía dentro y fuera de la casa. Los pequeños corrieron inmediatamente hacia donde el zapatero había dejado el cuero cortado, lo tomaron y comenzaron a trabajar sin descansar armando con increíble rapidez una enorme cantidad de zapatos. Antes del amanecer, ya terminado su trabajo, desaparecieron de repente.
Al día siguiente, mientras comentaba con su marido lo que había visto, la mujer dijo: “Esos duendes nos han dado más que lo que necesitábamos, y nunca nos pidieron nada a cambio; tenemos que hacerles saber de alguna forma nuestra gratitud. Deben de estar pasando muchísimo frío, así desnuditos como andan. Yo voy a coserles ropa y vos hacerles unos zapatitos”. El hombre se entusiasmó con la idea y ambos pusieron manos a la obra.
Esa noche, cuando los duendes llegaron, en el lugar donde antes el zapatero dejaba los cueros cortados, encontraron calzoncillitos, camisetas, pantalones, pulóveres, camperas, medias y tres pares de botas que eran una maravilla. Ahora los sorprendidos eran los duendes que, una vez vestidos, no podían dejar de mirarse al espejo, reír, cantar y bailar. Y casi al amanecer, se fueron bailando. Desde aquel momento ni el zapatero ni su esposa volvieron a ver a los chiquitos. Pero tuvieron una buena vida y no pasaron miseria nunca más.

jueves, julio 20, 2006

Las Cosas Que Vives

La amistad es algo que atraviesa el alma,
es un sentimiento que no se te va.
No te digo cómo, pero ocurre justo
cuando dos personas van volando juntos.
Suben a lo alto sobre la otra gente,
como dando un salto en la inmensidad.
Y no habrá distancia ni desconfianza,
si te quedas en mi corazón, ya siempre.
Porque en cada sitio que estés,
porque en cada sitio que esté,
en las cosas que vives, yo también viviré.
Porque en cada sitio que estés, nos encontraremos unidos
uno en brazos del otro, es el destino.
En la misma calle, bajo el mismo cielo,
aunque todo cambie no nos perderemos.
Abre bien los brazos, mándame un aviso,
no te quepa duda, yo te encontraré.
No estarás ya solo, yo estaré
continuando el vuelo
que te lleve con mi corazón, ya siempre.
Porque en cada sitio que estés,
porque en cada sitio que esté,
en las cosas que vives,
yo también viviré.
Porque en cada sitio que estés,
no nos queda más que un camino,
solo habrá dos amigos, tan unidos.
Cree en mí, no te atrevas a dudar,
todas las cosas que vives
si son sinceras como tú, y yo,
sabes tú, que jamás terminarán.
Porque en cada sitio que estés,
porque en cada sitio que esté,
En las cosas que vives, yo también viviré.
Porque en cada sitio que estés,
Que esté, porque en cada sitio que esté,
Y que esté.
Tú me llevas contigo dentro del corazón.
Porque en cada sitio que estés,
nos encontraremos unidos,
uno en brazos del otro, es el destino.
Es el destino.
Porque en cada sitio que estés,
porque en cada sitio que esté,
en las cosas que vives, yo también viviré
Muy feliz día del amigo para todos!!!!

Goodbye

Especialmente para DarkLady:

No no no no, no no no no, no no no no,

Listen little child, there will come a day
When you will be able, able to say
Never mind the pain, or the aggravation
You know there's a better way, for you and me to be

Look for a rainbow in every storm
Fly like an angel, heaven sent to me

Goodbye my friend (I know you're gone, you said you're gone,
but I can still feel you here)
It's not the end (gotta keep it strong before the pain
turns into fear)

So glad we made it, time will never change it - no no no

No no no no

Just a little girl, big imagination
Never letting no-one take it away
Went into the world, what a revelation
She found there's a better way for you and me to be

Look for a rainbow in every storm
Find out for certain, love's gonna be there for you
You'll always be someone's baby

Goodbye my friend (I know you're gone, you said you're gone,
but I can still feel you here)
It's not the end (gotta keep it strong before the pain
turns into fear)

So glad we made it, time will never change it
No no no no
You know it's time to say goodbye
No no no no

(bridge)

The times when we would play about
The way we used to scream and shout
We never dreamt you'd go your own sweet way

Look for a rainbow in every storm
Find out for certain love's gonna be there for you
You'll always be someone's baby

Goodbye my friend (I know your gone, you said you're gone,
but I can still feel you here)
It's not the end (you gotta keep it strong before the
pain turns into fear)

So glad we made it time will never never change it

No no no no
you know it's time to say goodbye
No no no no
and don't forget you can rely

No no no no
you know it's time to say goodbye
No no no no
and don't forget on me you can rely

No no no no
I will help, help you on your way

No no no no
I will be with you every day
no no no no

domingo, julio 09, 2006

El Brujo

En una profunda y oscura caverna tenía su hogar el más malvado y poderosos de todos los brujos. Tan malvado y poderoso era, que todos los habitantes de los valles vecinos vivían esclavizados por sus caprichos. Nadie se atrevía a rebelarse. Pestes, enfermedades, sequías, inundaciones y calamidades aun peores se desataban cuando las cosas no iban de acuerdo a los deseos del brujo.Mas el brujo tenía una debilidad: el mudai, una bebida alcohólica que producían los lugareños. Cuando quería mudai, todos corrían a prepararlo en grandes cántaros que luego llevaban hasta lo más profundo de los bosques, pues al malvado le agradaba beber sin más compañía que su propia y desgraciada persona.Durante todo el camino hacia los bosques iba cantando – desafinando, más bien – y encendiendo con una tea las campanitas que colgaban de las ramas de los árboles, para que le sirvieran de guías al regresar. Las borracheras que se agarraba eran tan grandes, que terminaba por no saber ni dónde estaba parado, ni hacia dónde tenía que ir.Un buen día, los lugareños juntaron valor y celebraron un gran consejo con todos los jefes.- Tenemos que encontrar el modo de detenerlo – anunció uno.- Yo diría, más bien, que hay que castigarlo – discutió otro.- Le pongamos en la bebida algún yuyo, así aprende.- ¡Yo digo que le aplastemos la cabeza con una roca!- ¡Y yo, que lo quememos vivo! – se enardeció el último.Y entonces, el más anciano y sabio de todos se levantó muy enojado para decir:- No hay peor maleficio que nos haya echado el brujo que este: habernos convertido en bestias que sólo desean hacerle tanto o más mal que el que él nos hizo. No es con crueldad que se responde a la crueldad, pues sólo la razón puede oponerse a la sinrazón del mal.Se pusieron a pensar y pronto idearon el medio más sencillo para sacarse de encima al malvado brujo. Prepararon mudai en cantidades suficientes como para provocar la peor borrachera de su vida. Y cargaron los cántaros hasta lo más profundo del bosque más lejano.Durante el recorrido, el brujo fue muy alegre encendiendo, como siempre, luces para no perderse al regresar. Pasó días y días bebiendo hasta la última gota del último cántaro y, cuando finalmente terminó, miró a su alrededor.- ¿Dónde estoy? – se preguntó desconcertado.Intentó seguir un camino y luego otro, pero ninguno parecía llevarlo a parte alguna. Algo faltaba.- ¡Las luces! – descubrió de pronto -. ¡¿Dónde están mis luces?!Ni una luz, ni lejana ni cercana, le serviría de guías esta vez pues todas habían sido quitadas. Pataleó, gritó, maldijo y amenazó, pero nada logró. Nunca más pudo encontrar el camino de regreso a su caverna. Vagó solitario por los bosques y, poco a poco, su propia maldad lo fue consumiendo hasta que, un buen día, se esfumó.Y, cuando los habitantes de los valles estuvieron seguros de que ya no regresaría, volvieron a colgar en las ramas de los árboles las luces que le habían quitado al brujo. Así quedaron hasta el día de hoy, pues esas luces son las flores del copihue que, como campanitas, iluminan los senderos para que nadie pueda perderse.Adaptación de una leyenda mapuche.

miércoles, julio 05, 2006

Cyberchismógrafo

0.- Cuál es tu apodo? Caro. Carito.
1.- Qué hora es: las 21:37
2- Nombre: María Carolina Dominguez
3.- Cantidad de velas que aparecieron en tu última torta de pastel: no me acuerdo, supongo que una.
4.- Estuviste enamorado anteriormente? Creo que casi.
5.- Estás enamorado? No.
6.- Tu cumple es el?: 13 de diciembre.
7.- Religión: Ninguna.
8.- Te has emborrachado?: No para tanto, bueno maso jajajja...
9.- Amaste tanto a alguien como para llorar? No. Igual no creo que el que llora, es el que más sufre.
10.- Estuviste en un choque de autos?: Si.
11.- Cómo andas vestido?: Jeans, remera y pullover cómodo, botas, zapatos o zandalias, según la estación.
12.- 2 o 4 puertas? Igual.
13.- Sprite o Seven up? Ninguna, para mí es bebida de enfermos.
14.- Cerveza o vino?: No me gustan.
15.- Café o té? : Té.
16.- Sabor de helado?: mmm qué difícil! Dulce de leche, limón y chocolate.
17.- Sábanas lisas o con animalitos?: Lisas
18.- Estatura?: 1.63 sin los tacos jaja
19.- Lugar para que te besen?: la boca, el cuelo, la frente...
20.- Canción que estas escuchando en este momento?: Ahora nada. Está prendida la tele.
21.- Tema de conversación más detestado? No se me ocurre nada, no tengo problema de charlar de lo que sea.
22.- Tom o Jerry? : Jerry.
23.- Disney o Warner Brothers?: Las dos, pero más Disney.
24.- Restaurante de comida rápida: Ninguno.
25.- Última visita a un hospital?: debe ser hace mucho porque no me acuerdo.
26.- De que color es la alfombra o piso de tu dormitorio? Gris.
27.- Peluche de dormir?: No duermo con peluches, juntan mucha tierra.
28.- Dónde te ves en 10 años?: Con un título y trabajo, espero!
29.- De qué persona recibiste el "encargo": de Alejandrito.
30.- Cuál de tus amigos vive más lejos?: Todos! jaja Lari está más lejos.
31.- Lo mejor: Una salida con amigos.
32.- Quién piensas que te responderá este "encargo" más rápidamente?: No lo sé.
33.- Mascotas? Simba, Pino y Betún.
34.- Qué cambiarias de tu vida?: Por ahora nada.
35.- Cuántos timbrazos para contestar el teléfono?: Varios.
36.- Video preferido: No soy de mirar videos.
37.- CD preferidos: Honestidad Brutal de Andrés Calamaro.
38.- Grupo o cantante favorito: Andrés Calamaro.
39.- Lo primero que piensas en la mañana cuando despiertas?: uhhhhh nooooooo
41.- Si pudieras ser otra persona, quién serias?: Nadie más que yo jajaja
42.- Nombra a las personas que no te contestarán y por qué: No sé quien, pero si no lo hacen creo que será por falta de tiempo.
43.- Quien te gustaría que la responda: Usagui, DarkLady, Latin Lover, Silvia y Sir Francis!
44.- Algo que tengas puesto siempre y nunca te lo quites: la ropa interior.
45.- Qué hay en las paredes de tu habitación?: nada.
46.- Qué hay debajo de tu cama?: Nada.
47.- Cuál es el auto de tus sueños?: Renault Laguna.
48.- Algo a la persona que te mando este "encargo”: Gracias! Me encantan las cadenas jaja.
49.- Colores preferidos: Negro y marrón.
50.- Palabras que más dices: No sé, debería preguntarle a mi público jaja
51.- Comida preferida: Bife con arroz.
52.- Qué buscas en tu pareja ideal: Que me quiera de verdad, nada más que eso.
53.- Qué le miras primero a el(ella)?: Los ojos y la sonrisa.
54.- Qué es para ti la vida?: Que pregunta complicada, Un regalo de no sé quien.
55.- Momento más triste de tu vida?: Muchos, no se me ocurre ninguno en particular.
57.- Momento más humillante: Por suerte, si lo hubo ya no lo recuerdo.
58.- Persona más loca y simple que conoces: Mis amigos, debe ser por eso quelos he elegido.
60.- Que fobias tienes: no tengo fobias.
61.- Qué piensas de la muerte: Que es algo tan natural como la vida.
62.- Te ha gustado algún amigo (a) tuyo(a) : Siiii (amigo) pero me desepcionó mucho.
63.- Tiempo que tardas en arreglarte: El tiempo que tardo en delinearme los ojos, es toda mi producción y lo hago hasta para ir al almacén!
64.- Revista favorita: No consumo revistas, pero me gustan las de moda que compra mi mamá.
65.- Le darías un beso a la persona que te envió este encargo: si, pero se lo envío a través de un cable... jajaja
66.- Qué estación del año te gusta más?: Otoño.
67.- Té irías a vivir a otro país: Hoy en día pienso que no.
68.- Quién no te ha fallado nunca: Algunos amigos.
70.- Carta o e-mail?: E-mail, las cartas casi nunca llegan y es más caro.
71.- La persona que mas extrañas?: Voy a extrañar a Lari el próximo cuatri... / Y si, al innombrable también lo extraño a veces, es inevitable...
72.- Qué te pone de buenas?: La música y la comida! jajajaja
73.- Caricatura preferida?: Batman, X-Men...
74 -.- Mejor cyberamigo? Ale y Paul.
75.- Equipos de fútbol: River!!!!!!
76.- Le darías un beso apasionado a alguien de los que mandaste el encargo?: Me cmpromete esta pregunta... jajajaja que se yo...
77.- Juego de mesa favorito: No me gustan los juegos de mesa.
78.- El peor sentimiento del mundo: La codicia y la indiferencia.
79.- El mejor sentimiento del mundo: Amor.
80.- Futuros nombres para tus hijos: Andrés, Máximo.
81.- Futuros nombres para tus hijas: Victoria.
82.- Chocolate o vainilla?: Chocolate.
83.- Una almohada o dos?: Una.
84.- Duermes con peluches: Noo...
85.- Si pudieras teñirte el cabello que color preferirías y se lo tienes teñido de cual?: No me lo teñiría, me encanta el color de mi pelo jajaja
86.- Cuál es tu numero favorito?: 10
87.- Juguete favorito?: De chica las Barbies.
88.- Qué hacés si alguien se quiere pasar con tu novio(a)?: ahh no sé, nunca me pasó.
89.- Dile algo a la persona que más quieres?: A mis amigos: Gracias por estar siempre! Los amo!!!
90.- Condimento favorito en una ensalada: Vinagre!!!!
91.- Qué no te gusta comer?: Remolacha.
92.- Quién te felicito primero en tus cumpleaños?: Mi familia.
93.- Quién es tu ídolo?: No tengo ídolos.
94.- Cuántos hijos te gustaría tener?: 2
95.- Con quién? ¿Cuándo?: Con alguien que crea sería un buen padre. . . Más adelante, cuando tenga mi vida un poco más organizada. Igual es algo en lo que no pienso.
96.- Te has masturbado?: Nunca.
97.- Te consideras guapo(a)? : No, para nada.
98.- Eres virgen,( si/no), con quien la perdiste la virginidad?: No, con alguien que me he propuesto olvidar.
99.- Te gustó contestar el cyberchismografo?: Siiiiii
100.- Qué hora es? 23:25

viernes, junio 30, 2006

La Cigarra Y La Hormiga

(Adaptación de una fábula de Esopo)

Era pleno verano y el calor tenía a mal traer a todos los animales del bosque. La única criatura que, pese a todo, seguía adelante con sus tareas como si el abrasante Sol no le molestara en lo absoluto, era la hormiga Juana, que iba y venía a su hormiguero, llevando provisiones.
- ¡Qué calor! – dijo mientras se secaba la transpiración con un brote de césped.
- Si tienes tanto calor, ¿por qué no descansas? – preguntó una voz.
Juana levantó la cabeza y vio a una sonriente cigarra, que muy cómoda y fresca, se abanicaba con una hoja en la rama de un árbol.
- Tengo que juntar provisiones para el invierno – le respondió.
- ¡Pero si estamos en pleno verano! – se asombró la cigarra.
- Por eso mismo, asintió Juana – tengo que aprovechar para llenar mi despensa en el verano, y así no me faltará comida en el invierno -. Y dando por terminada la conversación, cargó sobre su cabecita una diminuta semilla y se marchó rumbo al hormiguero.
- ¡Qué ganas de complicarse la existencia! – comentó la cigarra. Y comenzó a cantar:
Soy la cigarra que canta,
A mí el trabajo me espanta.
Yo disfruto de la vida
Al revés de la hormiga.
- Mejor no le respondo – pensó Juana, furiosa -. Si hago como que no la escucho, seguramente se va a terminar cansando y me dejará en paz.
Pero la cigarra no se cansó y pasó todo el verano inventando nuevas canciones para burlarse de la laboriosa hormiga.
Y llegó el otoñó y la cigarra siguió cantando, pero nadie la prestaba mucha atención porque todos estaban muy ocupados preparándose para el invierno. Los pájaros dejaban sus nidos para emigrar hacia lugares más cálidos. Los osos limpiaban las guaridas, lobos y pumas preparaban sus cuevas en las montañas, liebres y conejos cavaban sus madrigueras, las ardillas se acomodaban en los troncos de los árboles. Y la hormiga Juana, por supuesto, seguía llenando su despensa de provisiones.
- Este bosque se ha vuelto muy aburrido – comentaba la cigarra -; no sé por qué todos se apuran tanto si todavía falta un montón para el invierno.
Pero ese año el invierno llegó antes de lo previsto y, de todos los animales y bichos del bosque, la cigarra era la única que no tenía casa, ni comida, ni abrigo. Cuando quiso buscar un refugio, descubrió que hasta el más mínimo huequito del bosque estaba ocupado y que nadie deseaba su compañía.
Voló de un rincón a otro llamando inútilmente a todas las puertas, pero ninguna se abrió para permitirle pasar. A todas las casas acudió menos, por supuesto, a la de la hormiga Juana porque, si los demás no la querían con ellos – pensaba – mucho menos la querría la hormiga, de la que tanto se había burlado.
El frío se hizo más crudo y comenzó a nevar. La cigarra se sintió perdida. Volaba constantemente para mantenerse en calor, pero pronto se le acabaron las fuerzas y, muerta de frío y de hambre, se dejó caer al pie de un árbol.
Cubierta de nieve desde las patas hasta las puntas de las antenas, la cigarra fue adormeciéndose poco a poco. Entre sueños, sintió que alguien le tiraba de sus patas y le arrastraba el cuerpo. Cuando despertó, vio que se encontraba en la casa de la hormiga Juana, que la había acostado y abrigado, y le estaba preparando una rica sopa calentita de granos de arroz.

martes, junio 27, 2006

El Rey De Los Monos

Cuento popular de la India

Cuentan que en una ocasión Buda, el hombre más sabio de la India, de hallaba por el norte del país impartiendo enseñanzas entre sus discípulos. En esa región vivía el rey de los monos, un monarca déspota, soberbio y vanidoso que había erigido su trono al final de una larguísima y empinadísima escalera, para que todo aquel que quisiera llegar a él lo hiciera de rodillas y arrastrándose.
Cuando al rey le llegaron las noticias sobre la visita de Buda por esos lugares, anunció con desprecio en su corte:
- En cuanto Buda sepa que mi morada está cerca, enviará a algún emisario para que venga a buscarme y me lleve rápidamente ante su presencia, tan ansioso estará por conocerme. Más aun, puedo asegurarles que no aguantará la impaciencia y vendrá él mismo hasta aquí para que yo no tenga que gastar mis energías en trasladarme hasta donde él se encuentra.
Pasó un día, pasaron dos. Pasaron varias semanas, pero nadie apareció.
- ¿Pero cómo se atreve a faltarme el respeto de este modo? – protestó - ¡Soy el rey de los monos!¡ Gobierno sobre millones de monos que no se atreven a respirar si yo no les doy permiso!
Enfurecido, ordenó a su séquito que ensillara los mejores elefantes y se puso en camino. Cuando llegó al pueblo donde se encontraba Buda, se dirigió de inmediato ante su presencia y le espetó con dureza:
- ¡Soy el rey de los monos y tengo mucho, mucho poder! ¿Por qué no has mostrado interés en conocerme?
- Buda, en lugar de responder, sonrió.- ¡Acaso no has escuchado nada de mis proezas, valentías, mi fortaleza, mis numerosas habilidades? – siguió el mono -. ¡Puedo probártelo ya mismo! Partiré hacia el fin del mundo y luego volveré.
Muchos días pasaron y mucho camino recorrió el rey. Atravesó montañas y cruzó a nado océanos embravecidos. Caminó por médanos inmensos y casi murió de sed en los áridos desiertos. Padeció los fríos más intensos y los calores más agobiantes.
Finalmente llegó a un lugar en donde cinco enormes columnas le cortaban el camino.
- Este ha de ser el fin el mundo – se dijo, muy orgullosos y emprendió el regreso.
Cuando llegó al lugar de donde había partido, le anunció a Buda con mucha arrogancia:
- He sido capaz de ir hasta el fin del mundo y aquí me tienes. ¿Acaso no te arrepientes ahora de no haber querido conocerme?
Entonces, por primera vez desde que se encontraron, Buda habló:
- Mira a tu alrededor, pues yo no he visto que te movieras de aquí.
El mono observó donde se encontraba. No había ido más allá de la palma de la mano de Buda, y aquello que había confundido con un mar embravecido era sólo agua de lluvia caída en ella. Y las montañas y los médanos intransitables, sus rugosidades. Y los desiertos, unos pocos granos de arena. Y las cinco enormes columnas que anunciaban el fin del mundo, nada más que los cinco dedos de su mano.
- No consigues el respeto mediante el temor ni las amenazas. La vanidad y la soberbia sólo pueden conducirte al abismo - agregó, mientras lo depositaba en tierra firme.
Avergonzado, el rey mono escapó sin decir nada y volvió a su reino. Cuentan que, desde entonces, ya no despierta temor ni temblores en sus súbditos. Y, sin embargo, recién entonces comenzaron a atraerlo como a un verdadero rey.

domingo, junio 18, 2006

El Vendedor De Sombreros De Paja

A este no lo resumí porque me gustó tanto que quise dejarlo así, en su versión original...
(Basado en un cuento popular japonés)
En una pequeña choza de los alrededores de una aldea, cierta noche un matrimonio de ancianos se quejaba amargamente de su mala fortuna. Era un invierno muy crudo y las heladas habían arruinado los cultivos de su huerta.
- Pasaremos hambre y frío – se lamentaba el esposo.
- Quizá no debamos afligirnos tanto – lo consoló su esposa -. Aún me queda algo de paja con la que podré hacer unos sombreros para que los vendas en la aldea.
Aunque el anciano pensó que sería muy difícil que alguien los comprara, nada dijo. Habían vendido tantos sombreros de paja, que cada aldeano tenía uno para cada día de la semana. Pero su esposa había empezado la tarea con gran entusiasmo y, apenado, no quiso desalentarla.
La mujer trabajó dos días y dos noches sin cesar. A la mañana siguiente del tercer día tenía calambres en las manos y dolores en la espalda pero, finalmente, había terminado. Cinco sombreros de paja, bien hechos y resistentes, tenían ahora para vender. El hombre se calzó su propio y viejo sombrero y, despidiéndose de la esposa con un beso, se dirigió hacia el pueblo.
Recorrió sus calles de norte a sur y de este a oeste, voceando sin cesar: “¡Sombreros de paja! ¡Vendo sombreros de paja a muy buen precio!”.
Pero aunque pasaban las horas y se volvió ronco de tanto gritar, ni uno solo logró vender. Al caer la tarde, desalentado, se sentó en el banco de una plaza.
- Inútiles sombreros – dijo en voz alta -, nadie los quiere.
- A mí me vendrían muy bien – anunció una vocecita a sus espaldas -. ¿A cuánto los vendes?
El anciano giró la cabeza y descubrió a un pequeño tan pequeño, que apenas llegaba a la altura del banco.
- Depende – respondió el hombre, mientras observaba las vestimentas del niño, tan raídas y viejas como las que él mismo llevaba puestas. Lo miraba con ojos muy abiertos y tenía los cabellos empapados por la nieve que caía.
- ¿Cuánto puedes pagar?
- Espera, debo consultar a mis hermanos – dijo el pequeño y se zambulló entre unos arbustos.
A los pocos minutos reapareció, seguido por cinco chicos, cada uno dedillos más alto y de más edad que el que lo procedía en la hilera. El menor se acercó a él y extendió la mano, donde brillaba una única moneda.
- Es todo lo que tenemos. ¿Alcanza para comprar uno? – preguntó.
El anciano sonrió con tristeza. En muy poco lo ayudaría a él esa moneda pero, en cambio, muy útiles les serían a ellos los sombreros de paja.
- Guárdala – respondió -. Tú la necesitas más que yo. Y tomando sus sombreros, se los dio a los chicos. Con gran alegría se lo colocaron en la cabeza, pero pronto descubrieron un pequeño problema. Los sombreros eran cinco, y ellos, seis. Sin pensarlo dos veces, el anciano se sacó su propio sombrero y lo ofreció al más pequeño.
El mayor, entonces, se adelantó para decir:
- Desde que llegamos a esta aldea nadie, ni el más rico ni el más pobre, nos ha ofrecido siquiera una miga de pan duro. Pero tú, que tienes tan poco como nosotros, nos has dado hasta lo que no puedes dar.
Y haciéndole una graciosa reverencia, agregó:
- Vuelve a casa anciano. Tu mujer te espera con la cena.
El hombre los vio zambullirse entre los arbustos y emprendió el camino hacia su hogar. Ninguna cena lo esperaría a su regreso, pensó con tristeza. Pero al menos – se alegró – alguna utilidad habían tenido sus sombreros de paja. En cuanto abrió la puerta de la casa, profirió un grito. La mesa se hallaba servida con un banquete que ni en sus mejores sueños había visto. Carnes, pescados, pollos, verduras de todas las clases, pasteles, hogazas de pan, y frutas jugosas y maduras se hallaban dispuestos para quien quisiera comerlos.
Su esposa lo miró con el ceño fruncido y preguntó:
- Será mejor que me expliques de dónde sacaste el dinero para comprar todo esto.
El hombre, que no tenía la respuesta, sólo atinó a balbucear:
- De los sombreros de paja…
Mucho comieron esa noche, y la siguiente, y todos los días restantes de sus vidas. Y cada vez que la mujer preguntaba de dónde salía tanta abundancia, recibía la misma respuesta: de los sombreros de paja…
Nunca más supo el anciano de los seis hermanitos. Aunque, desde ese día, los aldeanos se preguntaban de dónde habrían salido esos duendecitos deceso que aparecieron entre los arbustos de la plaza, tan simpáticos y sonrientes con sus seis sombreros de paja.

El Sabio Ignorante

Un hombre que se consideraba a sí mismo un gran sabio y erudito, se hallaba de viaje por tierras que nunca había visitado. Era un hombre muy pensante, pues creía que a eso debían dedicarse los hombres como él, a pensar en cosas muy profundas que sólo los muy sabios y eruditos como él eran capaces de entender.
Buscando un lugar adecuado para dedicarse a pensar hasta que le saliera humo de la cabeza, llegó a un bosque desolado. Acomodó sus cosas en el pasto y se recostó contra el tronco de un árbol, allí se quedó dormido hasta que un campesino lo despertó.
- Bueno día téngase usté, señó.
- Querrá decir “Buenos díasss tenga usted, señorrr” – corrigió – .
El campesino lo miró y haciendo un gran esfuerzo por pronunciar cada palabra, repitió:
- Buenos díasss tenga usted, señorrr.
- Buenos días – respondió el sabio y, dando por terminada la conversación, volvió a cerrar los ojos.
Pero el campesino insistió:
- No esss de muy por aquí usted, nocierto, señorrr?
El sabio, bastante molesto contestó:
- Primero: nadie es de muy por aquí, ni de muy por allá. En tal caso, la pregunta sería si vivo por aquí. Y no, no vivo por aquí, aunque esto no es de su incumbencia. Y segundo, no se dice “nocierto”, se dice “no es cierto” – y volvió a cerrar los ojos.
- No será de mi cunvencia, pero no creo de que le convenga quedarse solo. Anda mucha bestia suelta por aquí – respondió el campesino.
El sabio bufó fastidiado.
- ¡No se dice “creo de que”, sino “creo que”! ¡Y no necesito consejos de un ignorante que no sabe hablar correctamente!
- Inorante soy, sí, señorrr,en asuntos de palabras, y veo que eso le molesta mucho.
- ¡¿quién le enseñó a hablar?!
- Naides – respondió el joven- soy automático.
El hombre se llevó las manos a la cabeza y casi se arrancó un mechón de los cabellos por la desesperación.
- ¡Autodidacta querrá decir, autodidacta!
- Yo quería ayudar – respondió tímidamente el campesino -, disculpe si lo oportuné. Como usté es forrajero, creí de que le vendría bien alguien que le diga anda hay peligro, y ande no.
- ¡Usted no me oportuna, me importuna, y mucho! ¡He venido hasta aquí buscando apartarme de la ignorancia humana que usted tan representa! ¡Porque un sabio como yo necesita la soledad para adentrarse en el conocimiento supremo del ser y la razón de su existencia! ¡De modo que le agradecería me deje ya usted en paz, pues las cataratas de barbaries que brotan de su boca perturban mi preclara mente!
Y, dicho esto, el hombre se alejó a grandes trancos, dejando al campesino bastante aturdido, porque lo único que había entendido de todo el discurso era que debía cerrar la boca.
Y nada dijo mientras lo veía caminar a paso vivo, ni tampoco cuando el hombre desapareció repentinamente, como si la tierra lo hubiera tragado.
- Debí avisarle que se me andaba directo al pozo, pero de seguro se me iba a salir otra barbariedad de la boca y le iba a entubar su cara mente. Lástima de que no le haiga falta ayuda. De seguro un hombre tan lustrado y sabiduroso podrá salir solo del pozo, sin que un innorante como yo lo ande disturbando. Y, dando media vuelta, volvió a su casa.

Leyenda oriental.

jueves, junio 15, 2006

La Camisa Del Hombre Feliz

Aquella mañana el rey despertó en su habitación, miró a su alrededor y anunció:
- Hoy no tengo ganas de levantarme.
La noticia corrió rápida y una reunión urgente de ministros y consejeros fue convocada por la familia real. Juntos aguardaron muy ansiosos el dictamen de los médicos, que revisaron minuciosamente al monarca, buscando el origen del mal que le aquejaba.
- Sano y fuerte como un roble - diagnosticaron por unanimidad, y todos suspiraron aliviados.
Pero, al instante, sus ceños se fruncieron con honda preocupación: el rey seguía negándose a abandonar el lecho ¡y nunca, en todo su reinado, había sucedido tamaño acontecimiento! Era ese rey el más activo de todos los reyes que habían tenido en el reino. Si hasta su esposa e hijos se quejaban de que nunca tomaba vacaciones…
- Quizá sea eso - aventuró la reina -. Quizá le haya llegado el momento de descansar un poco.
Pero esa tarde no se levantó. Y tampoco al día siguiente. Ni el otro. Así pasó una semana. Como ningún médico podía curar al monarca de aquella extraña dolencia que le impedía abandonar su cama, fue convocado entonces un sabio famoso por curar males extraños y enfermedades que aún no tenían nombre.
El sabio revisó al rey de los pies a la cabeza y del derecho y del revés, y finalmente dictaminó: el rey está triste.
A esa declaración siguió un instante de silencio donde nadie supo que decir. ¿Triste?, se sorprendieron todos. No tenía ningún motivo para estarlo. No existían conflictos con los reinos vecinos, la economía iba bien y el rey se volvía más rico cada año que pasaba. Sus súbditos lo respetaban, su familia lo amaba y sus servidores eran leales. ¿Por qué habría el rey de estar triste?, le preguntaron al sabio.
- No sé por qué – respondió el sabio -, pero si sé cómo curarlo. Busquen al hombre más feliz del reino y pídanle la camisa. En cuanto el rey se ponga la camisa de ese hombre, olvidará su pena y volverá a ser como antes.
De inmediato fueron enviados emisarios por todo el reino buscando a un hombre feliz. Pero pasaron los días, y las semanas, y no encontraron a nadie. Aquel que era feliz con su familia, se quejaba de que no ganaba lo suficiente para mantenerla. El que era feliz con sus ganancias, se quejaba de la familia que le había tocado en suerte. Y el que era feliz con su familia y sus ganancias, consideraba que a su vida le faltaba algo más. No parecía existir en el reino ningún hombre que fuera complemente feliz con su existencia. Pero un atardecer, uno de los hijos del rey escuchó al pasar junto a un campo recién labrado: - ¡Ah, qué buena jornada ha sido la de hoy! He comido bien, he trabajado aun mejor y esta noche tendré con qué comprar la comida para mi familia. ¿Puede haber un hombre más feliz que yo?
Quien hablaba así era un campesino descalzo, con el torso desnudo y vestido con unos pantalones remendados. El príncipe, sin siquiera presentarse, le ordenó: - ¡Dame tu camisa!
El campesino, sorprendido por el pedido, contestó tímidamente:
- No…No tengo ninguna camisa para darte, mi señor.
- ¡No puedes negarte, pues la necesito para sanar a mi padre, tu rey! ¡Dame tu camisa!
- Nada me gustaría más que ayudar a mi rey, señor mío, pero vuelvo a repetirte que no tengo ninguna camisa para darte.
Y por más que el príncipe insistió y amenazó, no consiguió que obedeciera su orden. Fue entonces hasta la casa propia del campesino y pasó largo rato buscando en cada rincón, hasta que comprendió que el hombre decía la verdad. Todas las ropas que poseía en este mundo no eran más que esos pantalones remendados que llevaba puestos. Pues aquel campesino, el hombre más feliz del reino, era tan pobre que nunca había podido comprarse camisa alguna.

viernes, junio 09, 2006

Historia de los dos que soñaron

Cuentan los hombres dignos de fe (pero sólo Alá es omnisciente y poderoso y misericordioso y no duerme) que hubo en El Cairo un hombre poseedor de riquezas, pero tan magnánimo y liberal que todas las perdió, menos la casa de su padre, y se vio forzado a trabajar para ganarse el pan. Trabajó tanto que el sueño lo rindió debajo de una higuera de su jardín; en el sueño vio a un desconocido que le dijo:
- Tu fortuna está en Persia, en Isfaján: vete a buscarla.
A la mañana siguiente se despertó y emprendió el largo viaje y afrontó los peligros de los desiertos, de los idólatras, de los ríos, de las fieras y de los hombres. Llegó al fin a Isfaján, pero en el recinto de esa ciudad lo sorprendió la noche y se tendió a dormir n el patio de una mezquita. Junto a la mezquita había una casa y "por el decreto de Dios Todopoderoso" una pandilla de ladrones atravesó la mezquita y se metió en la casa; las personas que dormían se despeetaron y pidieron socorro. Los vecinos también gritaron, hasta que el capitán de los serenos de auqel distrito acudió con sus hombres y los bandoleros huyeron por la azotea. El capitán hizo registrar la mezquita y en ella dieron con el hombre del El Cairo y lo llevaron a la cárcel. El juez lo hizo comparecer y le dijo:
- ¿Quién eres y cuál es tu patria?
El hombre declaró:
- soy de la ciudad famosa de El Cairo y mi nombre es Yacub El Magrebí.
El juez le preguntó:
- ¿Qué te trajo a Persia?
El hombre optó por la verdad y le dijo:
- Un hombre me ordenó en un sueño que viniera a Isfaján, porque aquí estaba mi fortuna. Ya estoy en Isfaján y veo que la fortuna que me prometió ha de ser esta cárcel.
El juez se echó a reir.
- Hombre desatinado - le dijo -, tres veces he soñado con una casa en la ciudad de El Cairo, en cuyo fondo hay un jardín y en el jardín un reloj de sol, después del reloj de sol una higuera y bajo la higuera un tesoro. No he dado el menor crédito a esa mentira. Tú, sim embarg, has errado de ciudad en ciudad, bajo la sola fe de tu sueño. Que no vuelva a verte en Isfaján. Toma etas monedas y vete.
El hombre las tomó y regresó a su patria. Debajo de la higuera de su casa (que era la del sueño del juez) desenterró el tesoro. Así Dios le dio bendición, lo recompensó y exaltó. Dios es el generoso, el oculto.













VAMOS ARGENTINA!!!!!!!!

domingo, junio 04, 2006

Andrés Dice (volumen 2):

Hay un lugar vacío, es el que había pensado sólo para los dos.

Parecía el cielo porque estabas conmigo, todavía soy tu amigo pero te deseo el bien.

Eso si, la cama nunca está vacía pero no es igual.

Me quema, me quema, saber que no vas a volver.

Me arde, me estoy quemando, estoy disimulando.

No quiero ser el estúpido que llama a las tres de la mañana.

Te devuelvo a la ciudad, no te puedo retener.

...No sabe distinguir el amor de cualquier sentimiento.

Bailo mejor acostado y no sé olvidar. (JaJaJa)

Yo quiero hacerla mi estrella. (Ahhhh)

El ratón que quería ser gato

Adaptación de un cuento popular de la India

Como todos saben, no existe ratón en este mundo que no tema a los gatos. Pero hubo un ratón que les tuvo más miedo que el resto, y a cualquiera, fuera bonito, feo, chiquito, grande, peludo o pelado.
Pum Pum se llamaba aquel ratón. O, mejor dicho, así lo llamaban sus amigos, pues bastaba que se acercara un felino para que se pusiera a temblar como una hoja y el corazón le latiera tan fuerte y tan rápido que desde lejos podía oírse: “¡pum pum, pum pum!”.
- ¡Ay! – se lamentaba. ¡¿Por qué tuve la mala suerte de nacer ratón?!
Harto de sufrir temblores y taquicardia, un día fue a ver a un poderoso mago, a quien le suplicó que lo transformara en gato. Con unos pases de varita por aquí y por allá, el mago lo convirtió en un gran gato pelirrojo que se fue a pasear muy orondo y muy tranquilo, pues ya no tenía temblores, ni el corazón le latía “’pum pum, pum pum!, como cuando era ratón.
- ¿Mejor que nadie se meta conmigo! – provocaba a cuanto animal se le atravesara en el camino.
Hasta que quiso la mala suerte que se cruzara con un bulldog que primero lo miró mal, luego frunció el hocico y, por último le mostró, entre gruñidos rabiosos, una hilera de blancos y afilados dientes.
En un santiamén, Pum Pum trepó a lo alto de un árbol donde se aferró a una rama, temblando y con el corazón a punto de estallar.
- No, esto no es lo mío – pensó, y fue otra vez a ver al mago.
- ¿Y ahora qué quieres? – preguntó este.
- ¡Oh, hechicero, he cometido un lamentable error! ¡No era gato lo que quería ser, sino perro! – exclamó.
El mago hizo unos pases de varita por aquí y por allá, y Pum Pum quedó convertido en un enorme y feroz mastín de musculoso cuerpo.
- ¡Aaah, esto sí que es vida! – exclamó gozoso, al ver el temor y el respeto que todos los animales demostraban ante su majestuoso paso.
Hasta que se topó con un tigre, que con poco respeto y nada de temor, primero lo miró mal, luego frunció el hocico y, por último le mostró una hilera de blancos y afiladísimos dientes.
Pum Pum no dejó de correr hasta que llegó a la casa del mago, tembloroso y con el corazón latiéndole “¡pum pum, pum pum!”.
- ¡Oh, hechicero, he cometido otro lamentable error! ¡Ahora me doy cuenta que no era perro lo que quería ser, sino tigre!
- Y el mago, ya bastante fastidiado, lo convirtió de inmediato en un joven y feroz tigre.
- - ¡Arrrf, arrrf! – iba rugiendo Pum Pum, muy contento, al ver el temor y respeto que el resto de los animales demostraba a su paso.
Hasta que se topó con un elefante que, sin ningún respeto y ni una pizca de temor, primero lo miró mal y luego comenzó a perseguirlo para aplastarlo.
Nuevamente fue corriendo Pum Pum a la casa del mago, tembloroso y con el corazón haciendo “¡pum pum, pum pum!”.
- ¡Oh, hechicero, he cometido otro lamentable error! ¡Me doy cuenta ahora de que no es tigre lo que debo ser, sino elefante! – imploró -. ¡O mejor, un dinosaurio! ¡O cualquier animal que sea lo suficientemente fuerte y grande para no sentir miedo por nada!
Sin responder, el mago hizo unos cuantos pases de varita por aquí y por allá y, cuando terminó, Pum pum había vuelto a ser un ratón.
- ¡Pero… ¡¿qué ha hecho?! – exclamó sorprendido.
- Corregí un error – respondió el mago -, pues esto es lo que siempre serás, hasta que entiendas que no es en el tamaño ni en la fuerza donde encontrarás el valor que te falta, mientras sigas teniendo el corazón más pequeño que un ratón.
Desilusionado y tembloroso, Pum pum emprendió el regreso a su ratonera con el corazón latiéndole bien rápido y bien fuerte, “pum pum, pum pum!”, mientras pensaba en el significado de las palabras del hechicero.
- ¿Qué me habrá querido decir? – sin preguntaba sin cesar.
Tan concentrado iba, que no vio a un gato que lo acechaba hasta que lo tuvo frente a frente. Pum Pum pensó unos instantes y decidió que estaba demasiado cansado para huir, de modo que, muy resuelto, se quedó ahí bien plantado, mirándolo directamente a los ojos.
El gato, que estaba acostumbrado a ratones que huían y chillaban de miedo, se mostró confundido ante la actitud de su pequeño contrincante.
- Mmm… - pensó preocupado -. Debe ser más peligroso que lo que parece – y huyó con la cola entre las patas.
- Pum Pum siguió su camino. Ese día dejó de temblar de miedo y su corazón dejó de hacer “¡pum pum, pum pum!” en el preciso momento en que entendió que había querido decirle el mago.

viernes, mayo 19, 2006

Andrés Dice (volumen 1):

Yo que soñaba despierto, ya no sueño dormido.

Dos Romeos son más que cualquier Romeo individual.

Entre recordar y entre olvidar me quedo con las dos cosas.

Un vaso de agua no es el mar.

Cuando no estás, duele más.

De grande me volvió a pasar lo mismo...

Algunos tristemente enamorados pagando todavía el precio del amor.

Cómo, Cuándo y Por Qué son demasiadas preguntas para hacerle al destino.

La culpa es un invento muy poco generoso y el tiempo tremendo invento sabandija.

Porque a mi como a todos se me olvida... si! esta es bien para mi...

jueves, mayo 11, 2006

Los Maderos

Sé que es muy largo este cuento, pero deja una gran enseñanza, ya que invita a la reflexión... Para los que se animen...
Había una vez tres árboles en la colina de un bosque, que hablaban acerca de de sus sueños y esperanzas.
El primer árbol soñaba con ser un cofre de tesoros, estar lleno de oro, plata y piedras preciosas, decorado con labrados artísticos y tallados finos, para que todos vieran su belleza.
El segundo árbol quería ser una poderosa embarcación para llevar a los más grandes reyes a través de los océanos y que todos se sintieran seguros de su fortaleza.
Finalmente, el tercer árbol deseaba crecer para ser el más recto y grande de todos los árboles del bosque, que la gente lo viera en la cima de la colina y pensara en Dios y cuan cerca estaba de alcanzarlo. Quería ser el más grande de todos los tiempos y que la gente siempre lo recordara.
Después de algunos años, un grupo de leñadores llegó al lugar donde estaban los árboles. Uno de ellos vio el primer árbol y decidió cortarlo para vender su madera a un carpintero. El árbol estaba muy feliz, debido a que sabía que el carpintero podría convertirlo en un cofre para tesoros.
Otro leñador cortó el segundo árbol con el objetivo de venderlo al carpintero del puerto, razón por la cual este árbol se puso muy feliz porque sabía que estaba en camino de convertirse en una poderosa embarcación.
El último leñador se acercó al tercer árbol, el cual estaba muy asustado, pues sabía que, si lo cortaban, su sueño nunca se volvería realidad. El leñador dijo entonces: “No necesito nada especial del árbol que corte, así que tomaré este” y cortó el tercer árbol.
El primer árbol fue convertido en un cajón de comida para animales, puesto en un pesebre y llenado con paja. Se sintió muy mal, pues eso no era lo que tanto había deseado.
El segundo árbol fue cortado y convertido en una pequeña balsa de pesca, no siquiera lo suficientemente grande para navegar en el mar. Con esto vio como su sueño de ser una gran embarcación que transportara reyes había llegado a su fin.
El tercer árbol fue cortado en largas y pesada tablas y dejado en la oscuridad de una bodega.
Un día, años más tarde, un hombre y una mujer llegaron al pesebre donde estaba el cajón fabricado con el prime árbol. Ella dio luz un niño y lo colocó sobre la paja que había en el cajón. El árbol sintió la importancia de ese acontecimiento y supo que había contenido el tesoro más grande de la historia.
Años más tarde, un grupo de hombres subió a la balsa en la que habían convertido al segundo árbol. Mientras estaban en el agua, se desató una gran tormenta y el árbol pensó que no sería lo suficientemente fuerte para salvar a los hombres. Ellos despertaron al que dormía y éste se levantó y dijo:"¡Quédate quieto!" y la tormenta se detuvo. En ese momento el segundo árbol se dio cuenta de que había llevado al Rey de reyes y Señor de señores.
Finalmente, un tiempo después, alguien tomó el tercer árbol convertido en tablas y lo cargó su espalda por las calles, al mismo tiempo que la gente lo insultaba y golpeaba. Se detuvo en la cima de una pequeña colina, donde el Hombre fue clavado al árbol y levantado para morir.
Cuando llegó el domingo, el árbol se dio cuenta de que él fue lo suficientemente fuerte para permanecer erguido en la cima de la colina y estar tan cerca de Dios como nunca, porque Jesús había sido crucificado en él.
Anónimo

viernes, abril 21, 2006

Para vos Usagi, te lo merecés por estar siempre. Sólo espero no te ponga mal. No está hecho con esa intención.

With Or Without You

See the stone set in your eyes
See the thorn twist in your side
I wait for you

Sleight of hand and twist of fate
On a bed of nails she makes me wait
And I wait without you
With or without you
With or without you

Through the storm we reach the shore
You give it all but I want more
And I'm waiting for you
With or without you
With or without you
I can't live
With or without you

And you give yourself away
And you give yourself away
And you give
And you give
And you give yourself away

My hands are tied
My body bruised, she's got me with
Nothing to win and
Nothing left to lose

And you give yourself away
And you give yourself away
And you give
And you give
And you give yourself away

With or without you
With or without you
I can't live

With or without you
With or without you
With or without you
I can't live

With or without you
With or without you

miércoles, abril 19, 2006

Let Love Lead The Way


Part of me laughs
Part of me cries
Part of me wants to question why
Why is there joy?
Why is there pain?
Why is there sunshine in the rain?
One day you’re here
Next you are gone
No matter what we must go on
Just keep the faith
And let love lead the way

Sin ganas de escribir, les dejo parte de un tema que refleja tal cual me siento yo HOY.

domingo, abril 16, 2006

HOLA GENTE!
Supongo debería arrancar con una presentación de quien soy, qué hago en este mundo, que me gusta, que no, cual es mi hobbie, cual mi libro favorito, comida, deporte, mi canción, una película, bla, bla, bla... Pero estoy segura que quienes entrarán a esta página son todos amigos/conocidos míos... Que ya saben quien soy...Por eso les digo: Gracias! Por invertir el valioso tiempo en entrar a mi blog y chusmetear un poco. Como verán aún no tiene mucho, pero de a poco... Sólo la letra de un tema de Andrés Calamaro que a mi me gusta mucho y de la cual saqué la frase que da título a esta página. No sé en qué momento me ví haciendo esto, pero la verdad es que cuando entré a la página de blogs leí: Cree su blog en 3 pasos, y eso me dió ánimo, aunque a mi me llevó más de 3... De todos modos, espero que no les resulte un embole y cuando tengan ganas o nada que hacer se den una vuelta...PD: Gracias Usagui por toda la ayuda brindada.

domingo, abril 02, 2006

El Día De La Mujer Mundial
Quién describirá la historia de lo que pudo haber sido, yo que soñaba despierto ya no sueño dormido, con quién estarás ahora, quién te va a dar de comer... en el día mundial de la mujer...
Voy a seguir hasta encontrar una parrilla en Dolores, no miraste bien en mis espejos retrovisores, ahora que pusiste el freno espero tengo que pensar en quien morder... morder....
Eduardo subí la radio, yo enciendo un petardo, cuanto falta para llegar a cualquier lugar...? Ojalá te sientas solamente un poco mal en el día de la mujer mundial... En el día de la mujer mundial...
Quién está preparado para ser un chico abandonado, quién tiene el blanco del camino en el ojo marcado. Uh Edu falta mucho para parar y comer, es el día mundial de la mujer... Uhhh
No entendí si vas a ser rey o esclava, no entendí si fui tu dueño o un borracho que pasaba. Soy grande pero tengo algo que aprender, es el día mundial de la mujer... Es el día mundial de la mujer...
Elegí pena u olvido o sudor compartido, ojalá no me arrepienta de haberme conocido, lo importante es que nunca pude hacerte sentir mal. Feliz día (Uhhh) de la mujer mundial... Feliz día de la mujer mundial....